En un
fallo de primera instancia el Tribunal Superior de Bogotá condenó al Juez
Morales Casas (Bernardo Morales Casas había sido condenado por proferir una
sentencia contra la estatal petrolera) a pagar ocho años y tres meses tras la
sentencia que emitió contra Ecopetrol en la que le ordenó pagarles 541.000
millones de pesos a sus ex-trabajadores. Según
el alto tribunal, los cargos de prevaricato por acción, pre
El caso
contra el juez Morales se inició porque en 1997 conoció una demanda que los
ex-trabajadores de la petrolera promovieron contra la empresa estatal. Esto
porque alegaban que Ecopetrol se había comprometido desde 1962 a pagarles el 3
por ciento de las utilidades anuales a los empleados, dinero que en 1997 no
había sido entregado. (Lea: Pleito de Ecopetrol da giro de 180 grados)
Así, el
16 de diciembre del 2005 el juez Morales Casas condenó a Ecopetrol declarando
que la firma estatal les debía a sus trabajadores más de 541.000 millones. Esa
cifra fue establecida por un auxiliar dentro de un trámite pericial que se
practicó durante el proceso civil.
Al no
prosperar ninguno de los recursos de Ecopetrol, la petrolera decidió demandar
al juez. Finalmente, el 24 de febrero del año pasado, el Tribunal Superior de
Bogotá decidió condenarlo afirmando que acogió sin reservas el dictamen
pericial. Además, la Fiscalía y Ecopetrol sostenían que ese dictamen no había
sido trasladado a las partes del proceso para ser controvertido. (Además:
Fiscalía pide medida de aseguramiento contra ex juez que estaría implicado en
escándalo de Ecopetrol)
En el
fallo, la Corte asegura que “el Tribunal considera doloso que Morales Casas no
aceptara la tesis del apoderado de Ecopetrol sobre la ausencia de notificación
del auto que ordenó el traslado del dictamen. Sin embargo, ese argumento carece
de fundamento porque la evidencia documental copiada señala que sí se concretó
la notificación, pues el proveído ostenta la constancia impuesta por el secretario
del juzgado, donde se consigna su inclusión en el estado 153 del 30 de Agosto
de 2004, sello y firma que no han sido cuestionadas o tachadas de falsedad
material o ideológica”, asegura la Corte.
Tomado del tiempo.com